El Grupo de Desarrollo Rural Montes de Toledo ha gestionado las ayudas procedentes del Fondo Europeo Agrícola de Desarrollo Rural Leader para la creación de “Alumora”, un taller de carpintería de aluminio en Mora
Carlos Lillo, moracho de 43 años, lleva desde mediados de los años noventa dedicándose al sector del aluminio. Su pasión le viene desde pequeño, a los 15 años comenzó a trabajar en el taller de sus tíos, donde aprendió un oficio que acabó por convertirse en la profesión de toda una vida y que ahora ve consolidado con la puesta en marcha de su nuevo taller en la calle Lepanto, 46 en Mora (Alumora).
“Talleres pequeños de aluminio como el nuestro no suelen ser fabricantes, en cambio nosotros formamos parte del proceso completo, desde la toma de medidas, fabricación, mecanización y montaje. Es nuestro principal diferenciador respecto a la competencia”, indica Carlos.
En ese sentido, en Alumora ofrecen tanto a particulares como a empresas el suministro de distintos productos como: ventanas, puertas, toldos, persianas, barandillas, escaleras, o cualquier elemento tanto de interior como de exterior que requieras las características del aluminio e incluso vidrio.
Es cierto que la esfera empresarial y el emprendimiento es complejo, no obstante, Carlos afirma que: “Existen profesiones en los que no hay relevo generacional y hay oportunidades de negocio importantes. En Mora existen otros dos talleres parecidos al nuestro que en poco tiempo estarán cerrados por jubilación. Ese factor fue determinante para dar este paso y apostar por permanecer en Mora, no queríamos dejar nuestro pueblo sin este servicio para nuestros vecinos. Además, es una profesión con bastante demanda”.
El Grupo de Desarrollo Rural Montes de Toledo ha contribuido con 4.717,93 €, un 30,15% del presupuesto total de la puesta en marcha de este proyecto y que proviene de ayudas procedentes del Fondo Europeo Agrícola de Desarrollo Rural Leader y de la Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha.
Las inversiones realizadas han incluido la compra de un compresor, la instalación y maquinaria de climatización de aire caliente y frío, aislamiento térmico del techo de la nave, pintura y saneado de las instalaciones y un equipo de ordenador con impresora.
“Sin la ayuda del GDR Montes de Toledo todo hubiese sido más costoso. Ha sido un empuje importante para la apertura de este taller con el que hemos podido consolidar dos puestos de trabajo como autónomos y esperamos aumentar la plantilla con uno o dos empleados más en un futuro próximo ”.